CUIDADOS BÁSICOS DE PELUQUERÍA PARA AFGANOS

Cuando un afgano llega a casa, todo se ve de color de rosa. Sin embargo, un ejemplar de esta raza es más complejo de mantener que cualquier otra, así que pronto el propietario pronto se planteará la pregunta clave: ¿Cómo cuidar el manto de un galgo afgano? he aquí LA cuestión de quien por primera vez cuida de un ejemplar. Así que, a modo de introducción, aquí tenéis algunos consejos para el arreglo de vuestro galgo afgano que han sido extraídos del libro “Peluquería canina” de TIKAL.

¡Espero que os resulte de interés! También os indico la referencia del libro por si queréis adquirirlo:

ISBN
8430555471
Editorial
Tikal-Susaeta
Formato
Tapa dura

CÓMO CUIDAR EL PELAJE DEL GALGO AFGANO

La mayoría de razas de manto largo no mudan, al contrario de las de manto corto, pero pierden pelo. Por lo tanto, si no lo eliminamos con regularidad (al menos 2 veces por semana) se quedará enredado en el mismo manto y se apelmazará en él.

Por ello, es muy importante cepillar al perro minuciosamente. Si se le aplica un acondicionador o una aceite al manto, es importante enjuagarlo a fondo y repetir el proceso cada 7-10 días. Esta rutina suelen hacerla los expositores que desean mantener bien largo el manto de su afgano de cara a las exposiciones caninas.

CARACTERÍSTICAS DEL MANTO

Siempre debes dejar crecer el manto de forma natural. Este manto es largo y de una textura muy fina en las costillas, los cuartos delanteros traseros y los flancos. En los ejemplares de mayor edad puede desarrollarse, de forma natural, un pelaje corto sobre la grupa ( ¡que no debe rasurarse ni recortarse!). El pelo es largo desde la frente y hacia atrás, con un copete sedoso característico. El pelaje del hocico es bastante escaso. Sobre las garras, por el contrario, puede no haber pelo. Se aceptan todos los colores, si bien debemos destacar que cada color se corresponde con una textura de pelaje ( y eso implica que con algunas se trabaje con más facilidad que con otras).

CUIDADOS BÁSICOS DE PELUQUERÍA

Como su sedoso manto requiere esfuerzo y experiencia considerables, hay que pensarlo mucho antes de adquirir un cachorro de esta raza. Para que un afgano esté impecable hay que bañarlo y cuidar su manto semanalmente, una tarea que no debe descuidarse ¡en ningún momento!. Esto es especialmente importante cuando el animal muda el manto (un proceso que comienza a los 14 meses y que se prolonga durante un par de años, hasta que el manto madura y se asienta). Además, durante el cambio de manto es posible que, en algunos casos, el perro necesite baños y otros cuidados con más frecuencia para evitar los nudos.

Tu criador te informará sobre cómo atender correctamente a tu galgo afgano, aunque también puedes acudir a la correspondiente asociación canina en busca de consejo.

Material necesario:

– Cepillo de púas metálicas (cuyas púas no estén rematadas por bolitas)

– Un spray con agua mezclada con un poco de acondicionador facilitará el cepillado y evitará que se rompa el pelo. Lo ideal es atender el perro únicamente después del baño semanal.

PROCEDIMIENTO

Mi galgo afgano DJOKO en la peluquería canina

Cepilla a fondo el manto con un cepillo de púas metálicas para deshacer los nudos y eliminar el pelo muerto. Si es necesario, rocía el pelaje con un spray acondicionador.
Pasa un rastrillo si es necesario.
Baña al perro con un champú suave y acláralo bien.
Aplicar un acondicionador que realce la sedosa textura del manto y ayude a prevenir los enredos.
Pasar la toalla para secar el exceso de agua.
Secar con el secador de mano mientras se cepilla el manto con un cepillo de púas metálicas. Al mismo tiempo, rociar la capa para reducir la electricidad estática y no darle tirones.
Examina las uñas, los oídos y la dentadura de tu galgo afgano.
Todo perro que haga ejercicio regularmente no necesitará que se le recorte el pelaje de las garras. Tal y como ocurre con el pelaje de resto del cuerpo, debe permitirse que el manto crezca de un modo natural en esta zona. no obstante, ten cuidado al cepillar las garras ya que el afgano es especialmente sensible al hecho de que se las toquen.
Dale un cepillado final, si fuer neceario, y utiliza al mismo tiempo el spray acondicionador para realzar el elegante aspecto de tu mascota. A continuación, divide el pelo de modo que caiga a ambos lados de la cabeza y el lomo. Esto no será necesario si el perro presenta una especie de silleta natural.

Estos consejos te resultarán útiles para la higiene semanal de tu mascota, pero recuerda que, de vez en cuando, es necesario acudir a un buen dog groomer que saque a relucir todo el potencial de tu mascota . 😉